En Olea tenemos un solo fondo en el que los gestores deciden dónde invertir, cuándo y cómo. En qué activos -renta variable, renta fija, divisa, derivados, etc.-, el peso de cada activo, si cubrir o no riesgos de la inversión, etc.
Las personas que invierten se suelen segmentar según su perfil de riesgo. Lo habitual es encontrar tres perfiles básicos de riesgo: conservador, equilibrado y arriesgado. Olea Neutral está dirigido a un amplio número de clientes, ya que tiene un nivel de riesgo de 4 sobre 7 según la Comisión del Mercado de Valores (CNMV).
Según el patrimonio invertido, se puede diversificar en un número de activos. Por ejemplo, si una persona invierte por su cuenta 25.000 € o 50.000 €, no tendría mucho sentido hacerlo en siete o más productos.
Olea ofrece un modelo de gestión en el que el cliente delega en los gestores la toma de decisión de inversión ajustada a su nivel de riesgo 5-9%, e intenta, con la suma de aportaciones de otros partícipes, ofrecer mayor diversificación en la inversión de la que podrían obtener por sí mismos.